Fundación Beethoven aplica criterio de excelencia: vuelve el Trío Guarneri

Romina de la Sotta Donoso

Mañana, en el Municipal de Las Condes, sus integrantes abordarán el Romanticismo, con Tríos de Suk, Brahms y Mendelssohn.

Han venido siete veces, siempre invitados por la Fundación Beethoven. Y en estos 15 años, el entusiasmo del público no ha hecho más que crecer en cada visita del Trío Guarneri de Praga, después de haber experimentado en primera persona su calidad interpretativa excepcional.

Con 32 años de trayectoria, este ensamble lo integran los miembros originales: Cenek Pavlik (violín), Marek Jerie (chelo) e Ivan Klánsky (piano). Han cosechado premios como el Diapason d’Or, el Choc y Le Monde de la Musique, además del aplauso unánime de la crítica.

«Como en anteriores visitas, el Trío Guarneri dio una lección maestra», escribió, por ejemplo, Jaime Donoso en su crítica para «El Mercurio», en 2013.

Ahora que han pasado dos años de su última actuación en el país, el chelista Marek Jerie confiesa: «Hemos echado de menos al público chileno. El Teatro Municipal de Las Condes es fantástico y el piano que tienen es un muy buen instrumento».

Y justo en ese espacio, el Teatro Municipal de Las Condes, el Trío Guarneri se presentará mañana en la temporada «Fernando Rosas» de la Fundación Beethoven. Además, vía Ley de Donaciones, ofrecerá hoy un concierto gratuito para estudiantes en el Teatro de Carabineros (Fundacionbeethoven.org).

«Nos gusta ir a Chile. En los conciertos en la Escuela de Carabineros es divertido, porque una parte del público está uniformada y la otra parte son estudiantes y gente joven (ríe). Es un público que está muy atento y en silencio, se siente su interés genuino», revela Jerie.

El programa mostrará tres facetas del Romanticismo. Abrirán con el Trío en Do Menor, Op. 2, de Josef Suk; para seguir con el Trío N° 1 en Si Mayor, Op. 8, de Johannes Brahms, y cerrar con el Trío N° 2 en Do Menor, Op. 66, de Felix Mendelssohn.

«Nos gusta partir con una obra no tan conocida para darle a la audiencia una experiencia nueva. Suk tenía 16 años cuando escribió este Trío, era alumno de Antonín Dvorák y con el tiempo se convertiría en su yerno. Esta obra nos muestra el intenso temperamento que tenía Suk a esa edad; es música muy íntima y llena de melodías tradicionales checas», cuenta Jerie.

 

-Brahms tiene tres Tríos, y Mendelssohn, dos. ¿Por qué eligieron los que tocarán?

«Creemos que el Opus 8 de Brahms es su mejor Trío con piano. Lo escribió de joven, pero volvió a él 25 años después, cuando ya era un maestro de la composición, así que es una obra maestra de un Brahms maduro, y tiene motivos musicales maravillosos. En el caso de Mendelssohn, elegimos su segundo Trío porque creemos que tiene la misma calidad que el primero, aunque no sea tan famoso, y nos hace entender por qué muchos llamaban a Mendelssohn ‘el Mozart del siglo XIX'».

 

-¿Cuánta vitalidad tiene actualmente el formato de trío con piano en el mundo?

«Han surgido muchos tríos nuevos, sobre todo de gente joven. El mejor repertorio de la música de cámara es para cuarteto de cuerdas, pero el Trío también tiene buen repertorio y más oportunidades solistas. Además, gracias al piano, nuestro sonido puede ser mucho mayor que el de un cuarteto de cuerdas. También hay ventajas prácticas, por ejemplo, cuando decides dónde cenar. Siempre serán dos votos contra uno. No hay posibilidad de empate», ríe.

 

-¿Tienen algún proyecto discográfico?

«Queremos hacer un CD con los mejores tríos de Joseph Haydn. Ya hemos hecho las integrales de Mozart, Beethoven, Brahms, Dvorák y Schubert, pero con Haydn eso es imposible porque son 42 tríos, y no todos tienen la misma calidad musical. Más adelante, queremos incorporar a un violista y grabar los Cuartetos con piano de Brahms o Dvorák. Como músico, uno debe estar expandiendo siempre el repertorio. Si crees que lo has hecho todo, dejas de practicar y de estudiar obras nuevas. Y cuando eso pasa, es el inicio del final».